
Escuchar día 3
Historia de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá
Fragmento
de Narváez en un lienzo de algodón de 1,26 x 1,13 cm., tejido por los indios. Como en el lienzo sobraba espacio, Alonso pintó al lado derecho a San Antonio de Padua, fraile franciscano, por ser el nombre del encomendero; al lado izquierdo pintó a San Andrés, apóstol, por ser el nombre del fraile que la solicitaba. La imagen fue colocada en la capilla pajiza de Suta, donde fray Andrés catequizaba a los indios de la región.
Cuando contribuimos al bien, somos instrumentos en las manos de Dios, a quién damos, con nuestros talentos, de lo que Él mismo nos ha dado. Y esto es un deber de Justicia para con Él. Así fueron: el pintor, los indios, el encomendero, el fraile. Y luego al sumar sus aportes el Cielo nos daría un regalo maravilloso a muchas generaciones, manifestado en este lienzo.

Petición: Virgencita del Rosario de Chiquinquirá, acude en nuestra ayuda para que quienes contemplemos tu imagen vayamos más allá de la visión estética de una obra de arte; y nazca en nuestros corazones el deseo ardiente de conocerte e imitar tus virtudes para escapar de los lazos materialistas que nos atan al mundo y nos conducen al pecado.
Jaculatoria: Pues eres de los pecadores, el consuelo y la alegría ¡Oh Madre clemente y pía, escucha nuestros clamores
Entrar por la Puerta Angosta
Mt 7, 1-14
“No juzguen a los demás y no serán juzgados ustedes. Porque de la misma manera que ustedes juzguen, así serán juzgados, y la misma medida que ustedes usen para los demás, será usada para ustedes.
¿Qué pasa? Ves la pelusa en el ojo de tu hermano, ¿y no te das cuenta del tronco que hay en el tuyo?
¿Y dices a tu hermano: ¿Déjame sacarte esa pelusa del ojo, teniendo tú un tronco en el tuyo?
¡Hipócrita!, saca primero el tronco que tienes en tu ojo y así verás mejor para sacar la pelusa del ojo de tu hermano.
No den de lo que es santo a los perros, ni echen sus perlas a los cerdos, pues podrían pisotearlas y después se volverían contra ustedes para destrozarlos.
Pidan y se les dará; busquen y hallarán; llamen y se les abrirá la puerta.
Porque el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y se abrirá la puerta al que llama.
¿Acaso alguno de ustedes daría a su hijo una piedra cuando le pide pan? ¿O le daría una culebra cuando le pide un pescado? Pues si ustedes, que son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos,
¡con cuánta mayor razón el Padre de ustedes, que está en el Cielo, dará cosas buenas a los que se las pidan!
Todo lo que ustedes desearían de los demás, háganlo con ellos: ahí está toda la Ley y los Profetas. Entren por la puerta angosta, porque ancha es la puerta y espacioso el camino que conduce a la ruina, y son muchos los que pasan por él. Pero ¡qué angosta es la puerta y qué escabroso es el camino que conduce a la salvación, y qué pocos son los que lo encuentran!” Palabra del Señor.
Meditación enfocada en nuestra realidad colombiana
Evalúa: ¿En qué estoy faltando yo a los mandatos de Dios? Vemos muy fácil el error en el otro pero no en nosotros. Justificamos nuestras malas acciones, y juzgamos las de otro, pero en nuestra conciencia nos creemos buenos, o astutos o sabios mientras al mismo tiempo trasgredimos lo que nos ha enseñado nuestra fe, las virtudes cristianas o la moral.
Tratemos a los demás como deseamos ser tratados, con amor, bondad, trasparencia, sinceridad. Vayamos en contra de nuestros propios intereses y egoísmo. Pidamos al Padre, la gracia de su Santo Espíritu que ilumine nuestras cegueras y nos muestre nuestras trasgresiones. ¡Santísima Virgen María, necesitamos una puerta abierta que nos permita volver la mirada con esperanza al Señor, y esa puerta eres tú!
ORACIONES
A REZAR LUEGO DE LAS MEDITACIONES LOS DÍAS 1º AL 12º
PRÁCTICA:
Háblale a una persona de manera esperanzadora diciéndole que ponga su confianza en Dios y en la intercesión de la Virgen del Rosario de Chiquinquirá, la patrona de Colombia, nuestro país.